El acarreo de bienes y mercancías del punto A al punto B requiere mucho mayor esfuerzo que el simple transporte. En el proceso se involucran aspectos como el manejo de materiales, la producción, embalaje, inventario, almacenaje y hasta la seguridad. De ahí que a lo largo del tiempo fueran propuestos diversos modelos a través de los cuales un paquete recibiera la debida atención para llegar a su destino de manera correcta. Como todo, la industria evoluciona y encuentra nuevos métodos cada vez más eficientes.
En tiempos recientes, dos empresas líderes en la industria (Markem y UPS) modificaron parte de la operación logística para que los sistemas de distribución fueran múltiples y así llegasen a más segmentos de clientes. En la terminología profesional se le empezó a denominar “logística híbrida” y es un campo aún en desarrollo cuyos pioneros han tratado de expandir a otros mercados internacionales.
Conjunción de elementos en apariencia distintos
¿Cómo lograr una distribución híbrida con lo que se tiene y lo que puede obtenerse? La explicación más sencilla de una logística de esta naturaleza recae en tres puntos nodales:
- Acuerdos y asociaciones de largo plazo con distribuidores, de tal manera que se crea una comunidad profunda entre el proveedor logístico y sus clientes.
- Satisfacción mutua de necesidades: productor/distribuidor satisfechos.
- Participación relevante de los intermediarios que de alguna manera proveen servicios complementarios a la línea productiva
En suma, la búsqueda de alternativas híbridas elimina pasos innecesarios que de otro modo significan dinero extra a la operación. Por otro lado, el funcionamiento de tiendas, locales, bodegas, hangares, redes, sistemas y el capital humano se torna más simbiótico porque todos tienen responsabilidades muy específicas dentro de la cadena productiva. Todos están informados de lo que hizo el paso anterior; análogamente, cada paquete puede rastrearse en tiempo real según el lugar donde se encuentre. Lo mejor de todo: hay manejos excepcionales de los incidentes, como el tráfico o las fallas propias del proceso.
Soluciones nuevas para una industria que evoluciona
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