Manejar productos metálicos para su embalaje y transportación puede ser una tarea complicada. No sólo hay que cuidar la conductividad eléctrica del material, sino su exposición al ambiente en caso de requerirse un tiempo de almacenaje o traslado prolongado. Debido a la acción corrosiva del oxígeno sobre superficies hechas con ciertas aleaciones metálicas, la probabilidad de daño es potencialmente alta si se evitan las medidas de seguridad recomendadas. Por fortuna, existen compuestos químicos diseñados para aislar el producto del oxígeno corrosivo que permea el ambiente.
¿Qué es la tecnología VCI?
Los Inhibidores Volátiles de Corrosión (o VCI, por sus siglas en inglés) transportan sustancias activas que se adhieren a la superficie del metal, formando una capa invisible de unas cuantas moléculas de grosor. El recubrimiento es invisible al ojo humano, pero permanece sobre el material durante años e incluso décadas con el manejo adecuado; esto, sin modificar o alterar la composición física del mismo.
Hay varias formas de recubrir un objeto metálico con VCI: papel, película plástica, bolsas y espumas. Según los requerimientos específicos de transporte, puede envolverse con materiales traslúcidos o que lo protejan de golpes accidentales. Cumplen con normas internacionales anticorrosión y de barrera, como la DIN 55530, TL 813500-19 y TL 8135-0043 nivel 3.
Fuertes, durables, pero al mismo tiempo amigables con el medio ambiente: los químicos de la fórmula anticorrosión no son tóxicos, no irritan al contacto con la piel, y el contenedor de éstos puede ser reciclado, depositado junto a la basura doméstica e incluso ser incinerado sin perjuicio al ecosistema.
Según el material, es la envoltura
Previamente se dijo que el VCI puede hacerse con materiales diversos. Uno de ellos es la película traslúcida Valeno®, la cual brinda una capa adicional de protección contra los rayos ultravioleta (UV) a través de tres capas de polietileno coextruido. Mientras la capa externa ofrece un recubrimiento blanco que refleja cualquier haz luminoso, el interior cuenta con una más de color amarillo y que presentan los componentes químicos VCI.
Con esta película anticorrosión, pueden envolverse objetos metálicos de largas dimensiones y hasta cinco tipos distintos: acero, latón, hierro fundido y sus distintas aleaciones. Bajo los cuidados adecuados, el efecto protector puede permanecer hasta 2 años sin deterioro alguno; inclusive puede llegar hasta los 15 años si hay una observación cuidadosa de aplicación y embalaje.
Proteja su material
Como puede verse, la protección contra radicales libres resulta de gran importancia si queremos transportar objetos metálicos muy sensibles a las condiciones ambientales. Si tienes dudas o preguntas sobre todo el proceso de embalaje, acércate a un asesor técnico de Grupo Velpak. ¡Nos dará mucho gusto ayudarte!