Cada día, en todo momento, circulan por el mundo grandes cantidades de paquetes que traen en su interior productos de consumo, especializados o componentes esenciales de máquinas. Grandes volúmenes se traducen en iguales cantidades de desperdicios en forma de espumas, plásticos, papel usado y cartón. Si bien la tendencia está inclinada hacia el uso de materiales que tengan capacidad recicladora, en el mercado aún circulan materiales no biodegradables.
Durante los últimos 20 años, la industria del packaging ha volcado esfuerzos importantes en favor de metodologías, técnicas y productos amigables con el medio ambiente, tanto en la disposición de desperdicios como la vida útil del embalaje. El packaging verde (o sostenible, como también se conoce) pretende un equilibrio constante entre manufactura y manejo de desperdicio para que exista un bajo impacto ambiental y menor consumo de energía. Debido a esto, las mercancías a transportar ahora están protegidas por opciones que no requirieron tanta energía para producirse, son biodegradables o directamente reciclables de acuerdo con sus propias características.
El medio ambiente necesita ayuda
Datos publicados en la revista Science Advances indican que desde el descubrimiento de plásticos sintéticos hemos producido 8,300 millones de toneladas métricas, de las cuales apenas el 9% lograron reciclarse mientras el resto permanece enterrada en rellenos sanitarios en espera de su descomposición. Sin embargo, para que un material de esta naturaleza logre desintegrarse lo suficiente para que microorganismos lo consuman, necesita alrededor de 400 años; por tanto, mucho del plástico vertido en basureros seguramente continúa ahí, tal cual fue desechado.
Mucho del desperdicio sintético proviene del packaging, ya que el usuario final desecha cualquier envoltorio tan pronto deja de ser útil. De ahí que la industria dedicada a empaquetar productos con otros materiales decidiera incursionar en el tema medioambiental a través de opciones reintegrables al ciclo productivo del embalaje. Esto es posible si utilizamos uno de los siguientes materiales
- Plásticos biodegradables
- Plásticos cuya materia prima son plantas
- Productos reciclados
- Orígenes alternativos de energía
- Bolsas de polietileno recicladas
- Cartón corrugado
- Papel
En términos generales, alguna de las materias primas anteriores será transformada en soluciones de packaging verde según la siguiente clasificación: basado en materiales renovables, paquetes con aditivos, optimización y material reciclado. Cada uno de los tipos tiene ventajas sobre los otros, sin embargo todos persiguen un objetivo común: impedir la acumulación sin control de basura que de otro modo puede volverse a utilizar con o sin modificaciones en su estructura.
Mejores empaques, mejor ambiente
El número de opciones en material sustentable crece año con año, y de manera paulatina encuentran nichos de mercado entre los giros industriales más importantes. En Grupo Velpak tenemos presente este compromiso, por lo que ofrecemos productos cuya huella ecológica es mínima. Pregunta a cualquiera de nuestros asesores por las opciones reciclables o biodegradables que tenemos para ti.
